Una mujer fue enviada a centro carcelario por decisión de un juez de control de garantías, tras la imputación de tentativa de homicidio por parte de la Fiscalía General de la Nación. De acuerdo con el expediente, el 27 de octubre la procesada habría arrojado a su hija de 10 meses al río Bogotá, en el sector de Puente de Lata (Engativá, occidente de Bogotá). La captura se produjo después del rescate de la niña y de la madre por parte de uniformados de la Policía.
La mujer no aceptó los cargos durante la diligencia. La medida de aseguramiento se fundamentó en los elementos probatorios aportados por la Fiscalía, entre ellos videos ciudadanos que registran la escena y declaraciones de los primeros respondientes. La menor permanece en un centro asistencial por complicaciones derivadas de la inmersión.
Según el relato presentado en audiencia, la procesada llegó con la bebé hasta la orilla del afluente y, de manera repentina, la arrojó al agua para luego lanzarse también. La corriente dificultó la maniobra de rescate, que fue liderada por patrulleros de la Policía Metropolitana de Bogotá con el apoyo de transeúntes.
La autoridad investigadora destacó la actuación inmediata de los uniformados, quienes ingresaron al río para asegurar a la niña y a su madre. Posteriormente, personal médico trasladó a la menor a una clínica cercana, donde se le practicaron exámenes por síndrome de inmersión y observación respiratoria.
En la audiencia de imputación, el ente acusador sustentó la tipicidad del delito de tentativa de homicidio con base en el riesgo creado y el medio empleado. La medida de aseguramiento intramural busca evitar una posible obstrucción a la justicia y garantizar la comparecencia al proceso, indicó la Fiscalía ante el juez.
El caso ocurre en medio de alertas de salud mental pospandemia y de incremento de reportes de intentos de autoagresión en Bogotá, según autoridades locales. Aunque no se han divulgado diagnósticos oficiales sobre la procesada, el expediente recoge que se activaron rutas institucionales de protección para la menor y valoración psicosocial.
En Engativá, el lugar de los hechos, la comunidad reportó presencia de autoridades durante el rescate y posterior recolección de evidencias. El sector de Puente de Lata es un punto donde históricamente el caudal y la contaminación del río Bogotá representan alto riesgo para operaciones de salvamento.
La defensa anunció que solicitará revisión de medida y eventuales peritajes psicológicos. La Fiscalía, por su parte, mantendrá la hipótesis de tentativa de homicidio y continuará con pruebas técnicas y testimoniales de los uniformados que intervinieron.
Desde la Policía Metropolitana, se reconoció la labor de los patrulleros que ingresaron al río. La Personería de Bogotá y el ICBF activaron protocolos de protección a la niña, que podría quedar bajo custodia provisional mientras avanzan los trámites judiciales.
Organizaciones civiles pidieron reforzar campañas de prevención y salud mental perinatal, así como barreras físicas y señalización en puntos críticos del río. Expertos en derecho penal recordaron que, de ser hallada responsable, la mujer enfrentaría penas agravadas por la condición de vulnerabilidad de la víctima.
El proceso continuará con la formulación de acusación y la práctica de pruebas en juicio. Entre tanto, la bebé permanece bajo observación médica y medidas de restablecimiento de derechos. El caso sigue en desarrollo y las autoridades anuncian nuevas diligencias.
